Redecorar, una gran tarea.

Messua llevaba unos día rara, en realidad no tenía mucha idea de lo que le pasaba, simplemente notaba que algo no iba bien. La semana pasaba tan deprisa y tan cargada de tareas, que no había tenido tiempo para mirar al cuello de su camisa y ver qué ocurría por dentro. Quizás si lo hubiera tenido, tampoco lo hubiese dedicado a preguntarse cosas, simplemente a dejar la mente en blanco, respirar profundamente y olvidarse de todo tan sólo por cinco minutos...

A veces le asustaba mirarse por dentro, quizás porque no sabía que podría encontrarse o quizás por no encontrar nada, incluso a veces por encontrar pero no hallar respuesta.

Suponía que su situación inestable afectaba indirectamente a gente cercana y eso le preocupaba, pero a veces tenía momentos que le superaban tanto, que se le acababan las fuerzas.

Hubiera aceptado en varias ocasiones desaparecer por un ratito de este mundo, pensar y volver nueva...

Hoy he descubierto que tengo pánico a bajar muchas escaleras, siempre imagino que tropiezo y bajo rodando hasta el final y me da un pequeño mareo sólo de pensarlo...El poder de la mente sin duda...

Me encanta explotar el papel de burbujas, el olor a gasolina, las siestas a las 19h y soplar dientes de león.